En un principio creía que las adicciones solo eran aquellas que venían acompañadas de sustancias, como las drogas psicotrópicas y/o alcohol. Luego al pasar de los años y con la madurez que fui adquiriendo, a través de estudios te das cuenta que las adicciones pueden venir de cualquier lado, hay las adicciones hacia algo : comida, drogas, alcohol, sexo, etc…
Y hay aquellas otras adicciones que la gente no las hace conscientes y están ahí dentro de nosotros como lo son: el dolor, el sufrimiento y la victimización.
Entiendo que cada quien tiene un proceso de sanción diferente, y que esta viene de acuerdo a los estándares de crianza y la educación. Pero pongamos un ejemplo: si te cortas la mano tienes una herida (duele, va a pasar un tiempo y vas a sanar) pero porque no buscar ese remedio que hace que sanes más rápido y duela menos… Por qué no tomar la determinación de sentirnos bien e identificarnos con el bienestar, con las cosas buenas y no pensar en aquello que nos atrasa mental, física y espiritualmente.
¿Por qué es difícil mantenerse más tiempo en estados de felicidad y de paz?
Porque el dolor también es una adicción, que a pesar de lo que esto conlleva nos hace sentir cómodos. Cómodos? si .. porque salir de ese dolor implica demostrar que puedes, es salir de la zona de confort, de ese espacio en donde la culpa de nuestros fracasos no la tienen otros, si no nosotros mismos. Asumir sería lo ideal para salir de esto, decir si tengo un problema, el segundo paso es trabajar en ello con amor y con la convicción de que todo estará mejor, habrán días buenos y días malos, pero con la madurez y las herramientas necesarias para seguir adelante, si no las consigues dentro de ti busca ayuda, conversalo y sal de esa adicción que no deja que veas el vaso medio lleno, es decir, no te deja enfocarte en las bellezas que te da la vida.
Vanessa Young.